martes, 25 de mayo de 2010

4_Amensia

Despertó un par de horas más tarde, le dolía la cabeza y no podía recordar nada, llevó ambos manos por inercia hacia esta, sintiendo un par de vendajes en ella. Al parecer estaba herida, pero la habitación en la que se encontraba no se parecía nada a un hospital.




-¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar?-se preguntó Amy con curiosidad, mientras parpadeaba un par de veces para divisar mejor aquel lugar.



Miró con detenimiento la habitación, empezando por la cama en la que se encontraba, las sabanas y la colcha eran blancas; y las almohadas eran suaves y blandas. Aun lado tenía un buro blanco, donde relucía una lámpara de noche y más al fondo, aun lado de la ventana se encontraba un sofá de color hueso. Al frente de la cama se hallaba un tocador de madera fina y blanca. Y a pesar de que todos sus muebles eran casi del mismo color, combinaba perfectamente con las paredes de color azul celeste que había en aquella habitación, fuera quien fuera el dueño tenía buenos gustos de remodelación



-¿Esto no parece ser un hospital? -se dijo así misma algo temerosa, en un pequeño lapso de tiempo su cabeza había tenido un montón de pensamientos he imaginado un montón de cosas, hasta que de pronto soltó un gemido en forma de temor y de sorpresa-¿Y si me han secuestrado?-su corazón comenzó a latir rápidamente, mientras un hueco se formaba en lo más profundo de su pecho ¿Sería cierto que alguien podría ser capaz de raptarla? Y si así era sólo había algo por hacer-De ninguna manera pienso quedarme ni un segundo más en este lugar-Amy se sentó al borde de la cama, tras sentir un intenso dolor a la altura de la cintura, desviando la mirada hacia abajo, notando que la mayor parte de su cuerpo se encontraba cubierto con vendas ensangrentadas, realmente se encontraba muy herida.



-"Jamás podre salir de este lugar"-musitó Amy por lo bajo, mientras un par de lágrimas recorrían su mejilla, lágrimas de dolor provenientes de aquellas heridas y lágrimas de tristeza por saber que sus esfuerzos serían en vano.



Se recostó nuevamente, al sentir que su cuerpo no resistiría sentir más aquel dolor, ahora mismo no tenía sentido intentar escapar de aquella habitación, pues, su mismo estado no se lo permitiría, sólo le quedaba esperar a que el dolor se le pudiese calmar o que alguien la viniese a buscar, pero ¿Cómo reconocería quienes eran sus padres si en ese momento su nombre sabía? Tampoco recordaba la dirección de su casa, ni el número que debía marcar en una emergencia, estaba claro que por más que lo intentara jamás podría salir de ese lugar, no mientras no pudiese recordar, y ¿Cómo sabía que su memoria podía regresar? Quizás se había ido para siempre y ella no podía hacer nada para recobrarla.



-Debo hallar la forma de salir de aquí, cueste lo que me cueste-se dijo así misma muy decidida



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Sonic logró suspirar con cierto fastidio, mientras que con suma lentitud posaba su mano derecha sobre su mejilla mirando sin emoción alguna el reloj de pared que tenía enfrente. Ya habían pasado dos horas desde aquel incidente en la ciudad y Amy aún no conseguía despertar, esa eriza comenzaba a preocuparle, sólo esperaba que lo que ella tuviera no fuera nada grave, pero aún se maldecía por dentro, por no haber estado en el sitio correcto en aquel momento. Tal vez si no hubiese estado perdiendo el tiempo en aquel parque cómo lo hacía cada mañana, seguro hubiese podido evitar que Amy sufriera aquel accidente.



-Sólo espero que Amy se encuentre bien…-pensó Sonic con intriga, cuando de pronto un extraño ruido lo saco de sus pensamientos, unos extraños y bruscos movimientos podían sentir desde la más profundo de su estómago, y cómo no, si desde la mañana no había probado algún bocadillo, pero ¿Qué podía comer en aquel momento?-¡Ya se! Iré a comprar un par de Chilidogs-dijo Sonic mientras se encaminaba hacia la puerta, pero antes de que consiguiera tocar la perilla, sacó esa absurda idea de su cabeza, ¿Qué tal sí la eriza lograba despertar mientras él se encontraba en la lejanía? Seguro estaría muy confundida y no sabría en donde se encontraba o peor aún ¿Qué tal si se marchaba mientras él no estaba?-Esta decidido, creo que me quedaré en casa a preparar un par de bocadillos-dijo mientras se encaminaba felizmente a la cocina, mientras tomaba un par de utensilios de cocina-Me pregunto qué les gustará comer a las chicas…-se dijo así mismo mientras colocaba una cuchara sopera sobre su barbilla.



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A pesar de que ya habían pasado un par de horas, él se mantenía de pie sobre el borde de aquel cerro, con la mirada en dirección al firmamento, varias veces se había preguntado si estaba haciendo lo correcto, pero muy tarde se había dado cuenta que salir de viaje así sin avisarle a Amy había sido algo incorrecto, seguro debería estar buscándole o quizás se encontrara preocupada por él. Shadow empuño las manos con fuerza, lo menos que quería ahora era perderla, no después de haberse dado cuenta de lo especial que ella era para él. Además de que estando a su lado se sentía como un chico soberano con muy buenos sentimientos dentro de aquella frialdad. Ella había calmado todo el dolor, la ira y la tristeza que sentía desde aquel día que había perdido a María. Amy le había enseñado que hasta el chico más frío y confundido tenía derecho a vivir una vida normal y ser feliz de algún modo.



-Sólo espero estar en lo correcto…-musitó Shadow al viento, mientras sacaba su esmeralda caos de su bolsillo, la miró por unos momentos y posteriormente la alzó, pronunciando unas extrañas palabras algo parecido a un…-¡Chaos Control!-y después de que una extraña luz verde apareció y lo rodeó completamente desapareció iría en busca de su amor, pero ¿Qué sorpresa se llevaría después de enterarse de lo ocurrido?



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Uff creo que me quedo un poco corto, pero a diferencia de mis otros fics no pienso aburrirlos con tanto royo, pues a veces da flojera leer tantas letras.



Bueno es todo por ahora, espero que les haya gustado espero traerles pronto el 5 capí…



Hasta entonces me despido, espero que tengan un excelente día…



Sayonara

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